A continuación, se relata una anécdota de una fobia, en la cual nos podemos dar cuenta lo que una persona hace y como es su reacción al estar en una situación en la que se presenta su peor miedo:
Mi marido le tiene fobia a las serpientes,y yo no me podia creer las cosas que me contaba acerca de como se le paraliza el cuerpo,suda,incluso llega a vomitar cuando ve a estos reptiles, me parecia exagerado. En una feria le compré a mi hija una de esas serpientes de madera que se contonean cogiendolas por la cola. La pobre niña quiso asustar al padre,que desconocía que la niña tenia el animalejo,y cuando se montó en el coche (ella atrás) comenzó a mover el bicho por encima del asiento del padre y a gritar "un bicho,un bicho!"Cuando el padre giró la cabeza y vió al animalejo moviéndose,casi le da un ataque al corazón! Salió corriendo del coche,se alejó unos cien metros y gritaba ¡Salid de ahí!".Cuando la niña y yo salimos tan tranquilas del coche,ella con el animalejo en la mano,cogido por la cola (con lo que seguia moviéndose) y caminabamos hacia él, él se alejaba corriendo aun más mientras decía "Tira eso,tira eso!". Nunca he visto a nadie sudar tanto,con la cara desencajada (sé que está mal,pero aun me rio a carcajadas cuando lo pienso).Y el pobre encima se llevó un rapapolvos por haber salido corriendo sin ponernos a salvo a la niña y a mí.Y menos mal que el coche estaba aun parado,porque cuando pienso en lo que podia haber ocurrido si estuviese en marcha...Ésto demuestra lo irracionales que son las fobias.
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